Pomellato invierte en la orfebrería Costanzo & Rizzetto

Pomellato se afianza en Valenza, el célebre distrito italiano de la joyería y la orfebrería, invirtiendo en Costanzo & Rizzetto. Propiedad de Kering desde 2013, la casa de joyas ha anunciado que ha tomado una participación minoritaria en esta empresa piamontesa especializada en orfebrería. Sin revelar el contenido de esta participación, ni el importe de la inversión, el joyero prefiere hablar de "una asociación a largo plazo".

Para esta última, que produce sus joyas en su sede de Milán desde su fundación en 1967, esta alianza debería permitirle reforzar sus capacidades de producción, al tiempo que se beneficia del know how de Valenza, la pequeña ciudad piamontesa especializada en orfebrería, donde ya están implantadas varias grandes firmas, entre ellas Cartier (Richemont) y Bulgari (LVMH).

En 2008, la empresa Costanzo & Rizzetto fue fundada allí por Davide Costanzo y Gregorio Rizzetto, herederos de dos familias de orfebres especializados en la fabricación de joyas y el engaste de gemas desde los años 70.

En la actualidad, Costanzo & Rizzetto, que trabaja para algunas de las marcas de joyería más importantes, emplea a unas sesenta personas y cuenta con una planta de 1200 metros cuadrados donde se integra todo el ciclo de producción, combinando la producción artesanal con la innovación. Tiene especial experiencia en la creación de joyas de esmalte, como se indica en su sitio web.

Esta operación "representa un paso fundamental para el desarrollo de Pomellato", afirma la directora general Sabina Belli en un comunicado de prensa, quien subraya cómo "la experiencia recíproca combinada con las futuras sinergias hará avanzar todo nuestro proceso de producción". Y contribuirá al crecimiento del joyero.

Pomellato invierte en la orfebrería Costanzo & Rizzetto

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