Off-White: de amarillo y lila en el ring de Marcel Cerdan

Por:

Godfrey Deeny

Publicado el
4 mar. 2019

Es casi seguro que habrá miles de seguidores de Diet Prada decepcionados por leer esta crítica, pero, en cualquier caso, la última colección de Off-White de Virgil Abloh fue realmente muy, muy buena.

Abloh ha sido ridiculizado en internet por, supuestamente, copiar a muchos otros diseñadores, pero, de nuevo, como solía decir el fallecido Karl Lagerfeld, "todos compramos".

Así, en una noche lluviosa el jueves, Virgil invitó a más de 1000 de los grandes y buenos a Bercy, al este de París, dentro de un estadio de boxeo subterráneo.

Usando toda la extensión del espacio cavernoso, mandó a su elenco sobre un enorme tablero de ajedrez, marchando con una maravillosa banda sonora de Eric B. & Rakim y Digable Planets.

El diseñador estadounidense cortó abrigos con solapas de seis pulgadas de ancho y envolvió a algunas modelos con abrigos de piel con estampado de tablero de ajedrez, combinados con zapatos de tacón de plumas. Puede que Abloh no sea un diseñador entrenado, pero quien sea que está cortando las chaquetas y las faldas plisadas no lo hace nada mal. Junto con el accesorio de la temporada, la sofisticada combinación de bolso masculino y riñonera. Y pensándolo bien, Virgil hizo más que nadie para crear.

Presentó bastantes faldas recortadas, centrándose en una tendencia reciente bien establecida, pero las versiones Off-White fueron halagadoras y cayeron muy finamente.

Y, uno tenía que amar su sentido del teatro: como los dos abrigos gigantes, hasta los tobillos, uno muy voluminoso, el otro en plata brillante. Además, su final de Grand Guignol de vestidos escandalosos con volantes en una tela que coincidía exactamente con el diseño del suelo fue una gran hazaña. ¿Alguien quiere jugar a las damas? Todo bajo de una batería de luces cambiantes.

 
En resumen, Abloh es un hombre muy trabajador que ha luchado por alcanzar la fama global, construyendo una gran marca nueva, contra todo pronóstico.

El espacio de boxeo en el que nos sentamos recibía su nombre por Marcel Cerdan. Fue un gran luchador, campeón del mundo, francés, que luchó cara a cara contra Jake LaMotta, tuvo un romance con Édith Piaf y murió en un accidente de avión en las Azores. Ningún francés ha tenido más coraje que Cerdan, y eso es lo menos que se puede decir de Abloh: este tipo tiene toneladas de coraje.