La familia propietaria de Tod’s seguirá invirtiendo en la marca pese a la caída de las ventas

La casa zapatera italiana Tod’s anunció este miércoles que seguirá invirtiendo en promocionar sus marcas y que las ventas decrecientes no han tentado a la familia propietaria a privatizar la firma de lujo.

El grupo, conocido por sus mocasines Gommino de 450 euros, ha estado peleando en los últimos años por rejuvenecer sus marcas en un mercado abarrotado y por impulsar sus lentas ventas.

Las ventas de la compañía cayeron hasta los 454,6 millones de euros en la primera mitad del año, un 4,7 % menos que en el mismo periodo de 2018. La tasa de crecimiento de las ventas en sus tiendas propias, por su parte cayó un 4,5 %.

En cambio, a Tod’s le llegaron noticias positivas por parte del canal minorista, donde las ventas aumentaron un 6,5 % aupadas por su e-commerce.

El director financiero, Emilio Macellari, explicó a los analistas en una conferencia telefónica que la compañía esperaba obtener unos resultados globales a fin de año similares a los de la primera mitad del ejercicio. 

En mayo, Macellari había dicho a los analistas que cumplir las expectativas del mercado para 2019 podía resultar todo un reto.

Por su parte, la familia del presidente y director ejecutivo, Diego Della Valle, ha ido aumentando gradualmente su participación hasta el 64 % en la compañía, cuyo portfolio de marcas incluye también a Hogan, Fay y Roger Vivier.

Della Valle, un conocido hombre de negocios en Italia, explicó en un comunicado que él y su familia confiaban en la estrategia ideada para Tod’s y que continuarían comprando acciones de la compañía. 

“El reto para nosotros es ser aún más atractivos para los jóvenes consumidores, que viven en nuevos mercados. Necesitamos aumentar nuestras inversiones para ser más visibles y atractivos”, indicó Della Valle.

Macellari apuntó que, hasta donde él sabía, la familia no había considerado la posibilidad de privatizar la compañía.

Preguntado por los analistas sobre si los principales accionistas creían en el futuro de la compañía, el presidente ejecutivo, Umberto Macchi di Cellere señaló: “La familia está muy convencida de que esto no es, para nada, una batalla perdida”.

Tod’s reportó una pérdida neta de seis millones de euros para el citado periodo.