La visión romántica y oscura de Valentino

Por:

Godfrey Deeny

Traducido por
Ana Ibáñez

Publicado el
18 ene. 2018

Romper las normas, reinventar unas mientras se rompen otras, ese era el mensaje de la última colección presentada en París de Valentino, la casa de moda más famosa de Roma.

Bajo la dirección de Pierpaolo Piccioli, Valentino se ha vuelto reconocible al instante por sus detalles rockeros de tachuelas y su debilidad por el camuflaje funky. Estos elementos volvieron a ser el leitmotiv de la colección de hombre para el otoño 2018, presentada en la mansión Salomon de Rothschild.
 
Pero esta temporada las tachuelas de estilo rock en lugar de ser detalles contundentes se convierten en distinguidas incorporaciones a abrigos de cachemir de corte impecable y levitas exclusivas. Mientras que el camuflaje, que antes se veía en chaquetas de nailon verde jungla, aparece en abrigos con motivos animales en tonos negros y azul, una expresión de la calidad de alta costura de muchas de estas prendas.

Valentino también se asoció con Moncler para crear un enorme abrigo acolchado (lo suficientemente grueso para que un entrenador soviético lo use en un partido en Kazajistán a temperaturas bajo cero). En su nueva colección, el diseñador ha puesto un toque rapero a las prendas y están acabadas con otro invento de Piccioli, el logo VLTN, introducido el año pasado.
 
“Aristopunk, una sutil rebelión" tal y como definió su colección el diseñador romano. Aunque, sinceramente, mientras que los rockeros recorrieron los pasillos y habitaciones de las mansiones del país desde que los Rolling Stones grabaran Their Satanic Majesties Request, hemos encontrado pocos punks entre la alta burguesía.
 
Respaldado por maravillosos fragmentos de los clásicos de David Sylvain como banda sonora, el desfile estuvo bañado de un claro aire festivo. El front-row estuvo plagado de estrellas de cine, desde Pedro Pascal, protagonista de Narcos y Juego de Tronos, a Mark Ruffalo, que interpretó al encolerizado periodista de la oscarizada Spothlight sobre los abusos infantiles cometidos por sacerdotes cristianos en Boston. Todos se unieron a la fiesta posterior, en un ambiente animado y de felicitaciones.
 
Pero no hay nada de abusivo en el rendimiento financiero de Valentino. EL CEO Stefano Sassi declaró a FashionNetwork que la casa había conseguido un respetable aumento del 5% en sus ingresos anuales hasta situarse justo por debajo de los 1200 millones de euros en 2017. Así que hay un método en toda esta locura de alterar el ADN de una marca.