Emporio Armani conversa con Japón

"Ve al Oriente, hombre joven", fue el mensaje de Emporio Armani, en un show titulado "Un diálogo con el Japón de otra era". Los fantasmas de Akira Kurosawa y Kenji Mizoguchi flotaron en una excelente colección, con Giorgio Armani y su variación de motivos japoneses, proporciones, colores y detalles.

Nada resumió mejor el tono que cuando una media docena de jóvenes apareció en seis espléndidos trajes de oro, souvenir jackets y bombers vintage de estilo Skajan, muchos con estampados de crisantemo.

Además de las bombers kimono, increíbles trajes de seda de dandy asalariado finalizaron con el proscenio ceremonial; las chaquetas Hanten más cool con lazos y botones, combinados con pantalones cargo voluminosos.

También hubo un elegante estilo, desde las dobles bandas para la cabeza de piloto de combate hasta una serie de zapatos Brogue a cuadros para una fiesta de Yakuza.

Además de lo anterior, un imitador de luchador de judo ejecutó un gran melodramático golpe para el deleite de los fotógrafos y la audiencia.

"Tengo una historia de amor con Japón desde que fui hace 35 años con Karl Lagerfeld. Me encantó la estética y el hecho de que la gente fuera tan tremendamente educada", sonrió Armani, mientras imitaba a los japoneses haciendo una profunda reverencia ceremonial.

La estrella de pop Shawn Berry fue el punto final del show. Vestido con una chaqueta bomber de seda pintada con el mismo dibujo negro y de flores de la invitación de la pasarela, Berry mostró el nuevo reloj inteligente Emporio Armani Connected.

"Estaba preocupado de que tal vez fuera demasiado disfraz. Pero al final pienso que lo hicimos bien", añadió el diseñador, después de posar para las fotos con Shawn. La generación joven, sutilmente humilde, ante el maestro octogenario.

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